miércoles, 23 de septiembre de 2015

CONFIANZA (I)


¿Qué sería para usted un milagro?, ¿qué podría ocurrir en su vida que pudiese ser considerado como un milagro? La Vida hoy le pide que a lo largo de los momentos especiales del día, penetre en el sí mismo, respire profundo y se formule la pregunta, ¿qué sería para mí el milagro? Permítase sentir respuestas, por sutiles que éstas aparezcan en su consciencia.

Ante esta pregunta, alguien dijo cosas muy interesantes acerca de las necesidades de su ego. Pensaba que si de pronto lograba una suma de dinero muy elevada, sus limitaciones serían resueltas. A partir de ahí, pondría en marcha algunos objetivos que hasta entonces le parecían utopía. Pensaba que su demanda de abundancia incrementaría la capacidad de acción de tal forma, que podría materializar todos los sueños, tanto los suyos propios como los de aquellos seres que le rodeaban. En realidad, aquella persona quería convertirse en un inteligente Rey Mago.

Alguien también explicó que tras el abrazo sexual existían posibilidades insospechadas de trascender su mente racional y abrir su conciencia a la esfera transpersonal. Su milagro consistía en hacer posibles estos increíbles viajes a lo Real que, de manera progresiva, le producirían no sólo una mutación psicosomática, sino lo que denominaba como liberación de la ilusión. Afirmaba, asimismo, que tras cada viaje orgásmico a la visión de Totalidad, compartiría su experiencia y enseñaría a otros cómo alcanzarla. Otra persona dijo que su milagro consistiría en tener del don de sanar todo dolor que pasase por su camino. Quería disponer de la capacidad de ayudar a reconducir los conflictos emocionales de las personas. En realidad, quería hacer milagros en las heridas abiertas del alma.

Otra persona dijo que su milagro consistiría en ser capaz de soñar durante la noche todo aquello que eligiese soñar, pero dándose cuenta de que estaba soñando. Es decir, quería experimentar los llamados sueños lúcidos. Aquella persona creía en el inmenso potencial que existe durante el sueño y desde esa realidad tan maleable, quería devenir capaz de experimentar todos sus deseos, por muy increíbles que éstos pareciesen. Deseaba tener experiencias placenteras por entre los pliegues del pasado y del futuro, además de conectar con civilizaciones insólitas de otros planetas.

Alguien también dijo que su milagro particular consistiría en percibirse en la Presencia, desterrando para siempre el miedo y fluyendo con la vida en el Amor y la Confianza. Su milagro era saberse y sentirse Luz con la consiguiente expansión de su conciencia por los confines del Universo. Saltar a la Infinitud y trascender la barrera de la mente racional.

Ante tales testimonios, tal vez lo importante sea abrir la mente al todo es posible recordando el poder ilimitado de ésta. No pensemos que nos falta realismo e imaginemos que ya sucede lo que deseamos, que ya lo tenemos y lo sentimos. La verdadera felicidad sucede en la pupila del alma. Tal vez, lo que usted ahora vive, tiene una cierta relación con semillas y condicionamientos de su infancia. Siembre el futuro en el presente. Diseñe de nuevo su vida y recréese ahora ya consciente. No dude de lo que quiere. Usted sabe que el simple hecho de sentirlo significa que aunque parezca increíble, está en su camino y de alguna forma lo merece. No se rebaje ni un sólo grado por viejos reproches o antiguas culpas. Mire al cielo estrellado de la noche y sonría, que ya es el momento de ser libre y de permitir que la brisa cálida roce su alma. Sea realista y, ¡espere un milagro!

Extracto del libro: INTELIGENCIA DEL ALMA, 144 avenidas neuronales hacia el Yo Profundo de José María Doria

Pensamientos extraordinarios





Ten presente que no busco tu aprobación ni influir sobre ti, me sentiré satisfecho si a partir de ahora comienzas a investigar todo por ti mismo.

Las circunstancias siempre me han golpeado porque me consideraba un ser humano afectado por el condicionamiento externo. Ahora me doy cuenta de que soy el poder que comanda las sensaciones de mi mente y del que surgen las circunstancias.

Si quieres ver la verdad claramente, nunca te muestres a favor ni en contra. La lucha entre “a favor” y “en contra” es la peor enfermedad de la mente.

Recuerda amigo que la utilidad de la taza reside en su vacío.

La moda no puede durar, porque es externa y pronto cansará tanto a quien la luce como a quien la contempla.

El árbol rígido es el que más fácilmente se quiebra, mientras que el bambú o el sauce sobreviven gracias a su flexibilidad frente a la acción del viento.

La persona semidesarrollada habla para impresionar. Los falsos maestros del Camino de la vida utilizan un lenguaje florido. La cultura a medio camino conduce al ornamento. Un alto nivel de cultura conduce a la simplicidad.

Cuando he escuchado a mis errores, he crecido.

Las personas tiene que crecer a través de una serie de frustraciones oportunas, ya que de lo contrario no contarán con incentivos para desarrollar sus propios medios y formas de afrontar el mundo.

Cuanto más posees más tienes que perder. Cuanto más valoras las cosas, menos te valoras a ti mismo.

Cuanto más dependes de los otros en lo que a la estima se refiere, menos autosuficiente eres.

Resulta sencillo criticar y acabar con el espíritu ajeno, pero conocerse a uno mismo posiblemente lleva una vida. Asumir la responsabilidad de las propias acciones, buenas y malas, es otra cosa. Después de todo, el conocimiento simplemente significa autoconocimiento.

Poderoso es quien se conquista a sí mismo.

Cada uno debe liberarse a sí mismo, mientras acepta el hecho de que todos somos de este mundo y que en verano sudamos y en invierno tiritamos.

Ser humilde frente a los superiores es un deber; frente a los iguales es cortesía; frente a los inferiores es nobleza, y frente a todos, ¡Seguridad!

Podemos ver a través de los demás cuando vemos a través de nosotros mismos.

Los errores siempre son perdonables si tienes el valor de admitirlos.

Si te ignoras a ti mismo por desempeñar una imagen, te convertirás en el objetivo, te volverás dependiente.

La evaluación que realizan los demás no es una guía para mí. Sólo el autosuficiente es autónomo; la mayoría de la gente sigue la corriente e imita.

Cuando un ser humano en proceso de autoactualización ve pasar a otra persona en su misma circunstancia, no puede evitar decir: “Que bien, alguien real!”

No existe otra ayuda que la que nos ofrecemos nosotros mismos.

Ser uno mismo favorece el surgimiento de relaciones verdaderas, y la aceptación del ser conduce al cambio.

Casi todas las personas viven únicamente para su imagen; por esa razón, a pensar de que algunos individuos disponen de un ser, de un punto de partida, la mayoría de la gente no cuenta con más que un vacío, porque está sumamente ocupada proyectándose a sí misma como tal o cual cosa, dedicando su vida a concretar el concepto de lo que debería ser en lugar de desarrollar su potencial como ser humano, en constante crecimiento.

Quienes son inconscientes caminan en la oscuridad y nunca buscan la luz, pase lo que pase, debes permitir que tu luz interior te guíe y te saque de la oscuridad.

Alcanzar el centro, mantenerse en contacto con la realidad de uno mismo, es el más elevado de los estados que un ser humano puede alcanzar.

Sólo se te pide que cumplas con tu propia misión en la vida sin pensamientos de agresividad ni competición.

Una persona espejo es alguien que siempre desea saber cómo se ve a los ojos de los demás. En lugar de ser crítica, proyecta la crítica y se siente criticada y muy expuesta.

Todos tendemos a tener más fe en lo que imitamos que en los que originamos. En general, sentimos que no podemos crear una sensación de certeza absoluta a partir de algo cuya raíz parte de nosotros mismos.

La libertad radica en comprenderte a ti mismo a cada momento.

Para liberarte, observa atentamente lo que haces normalmente. No condenes ni apruebes; limítate a observar.

No te esfuerces por transformarte, simplemente sé.

Haz un alto en tu interior en este mismo momento: cuando te detienes por dentro, psicológicamente, tu mente se apacigua, se clarifica. Sólo entonces consigues VER realmente.

Imponer a los miembros de un grupo una preformación fija, desprovista de vida, lo único que consigue es bloquear su crecimiento natural.

Recuerda que el hombre creó el método y no al contrario, y no te esfuerces por encajar en el patrón preconcebido de otra persona, que sin duda alguna resultará apropiado para ella pero no necesariamente para ti.

Dado que el hombre no quiere ser perturbado ni mostrarse inseguro, establece un patrón de conducta, de pensamiento, un patrón de relación con otros hombres, etc. Entonces se convierte en un esclavo de dicho patrón y lo considera algo real.

Cuando nos aferramos a la forma, cuando se produce el apego de la mente, no estamos siguiendo el camino verdadero. Si eliminas por completo todos los objetos de tu mente, notarás que la vida se expande de forma considerable.

Los ideales, los principios, “lo que debería ser”, conducen a la hipocresía.

Cuanto más consciente eres, más te despojas, día a día, de lo que has aprendido; sólo así consigues que tu mente se mantenga fresca, no contaminada por el condicionamiento previo.

Un actor, ante todo es un ser humano, “estrella” es el término abstracto que, al fin y al cabo, no es más que un título que te conceden otras personas. Existen más personas interesadas en convertirse en “estrellas de cine” que en actores.

La libertad descubre al hombre cuando éste deja de preocuparse por la impresión que está causando o se encuentra a punto de causar.

Cuando un hombre busca tu consejo, generalmente quiere que le alabes.

Es bien sabido que, al final, el individuo llega a creer lo que se repite a sí mismo, independientemente de que la afirmación sea verdadera o falsa. Cada persona es lo que es por el tipo de pensamientos dominantes a los que permite ocupar su mente.

No temas al fracaso, en los grandes intentos, incluso la derrota resulta gloriosa.

No es siempre necesario alcanzar las metas. A veces simplemente actúan como algo a lo que debemos apuntar.

Si crees que algo es imposible, lo harás imposible. El pesimismo desafila las herramientas que necesitas para triunfar. Lo que piensas habitualmente determina en gran medida lo que llegarás a ser.

Nunca derroches tu energía en pensamientos negativos. Ningún hombre es derrotado a menos que se sienta desanimado.

Comencemos por modificar nuestra actitud, no por alterar las condiciones externas.

El problema radica en la anticipación del sufrimiento. El sufrimiento en sí mismo afecta menos los sentidos que la anticipación del sufrimiento.

Lo importante no es lo que sucede en nuestra vida, sino la forma en que reaccionarios ante ello. El fracaso es lo que nuestra mente reconoce.

Mi única recompensa segura radica en mis acciones; no surge de ellas.

La lectura especializada es el alimento de la mente.

Sé como el agua, el agua tiene forma y sin embargo no la tiene. Es el elemento más blando de la tierra, pero penetra en la piedra más dura. No tiene forma propia, pero puede adoptar la del objeto que la contiene.Puede fluir rápida o lentamente, pero su propósito es inexorable, su destino seguro.

La mayoría de las personas proclives a desafiar se sienten inseguras y quieren utilizar la pelea como medio para alcanzar algún objetivo desconocido.

El gran error consiste en anticipar el resultado final, nunca debería pensar si acabará en victoria o derrota.

No es posible aclarar el agua turbia con las manos, ¿Quien puede aclarar el agua turbia? Sin embargo, si permitimos que no se agite, el agua se aclara por sí sola. ¿Quién puede asegurar un estado de absoluto reposo? Sin embargo, si te mantienes en calma y dejas pasar el tiempo, el reposo llega poco a poco.

No añadas preocupación a tus problemas, acepta los hechos y afróntalos, ¿No resultan ya suficientemente problemáticos como para que les añadas el agravante de preocuparte por ellos?


Soporta los insultos pacientemente, solo ello te permitirá seguir tu camino en paz. La paciencia no es pasiva; por el contrario, se trata de fuerza concentrada.

La soledad es sólo una oportunidad para descubrirte a la deriva y encontrarte a ti mismo. En la soledad te sientes menos solo. Haz buen uso de ella.

Las penas son nuestros educadores, un hombre puede ver más a través de una lágrima que de un telescopio.

Recuerda, amigo mío, que lo que cuenta no es lo que sucede, sino cómo reaccionas ante ello. Tu actitud mental puede convertirse en un escalón para avanzar, o en un escollo en el camino.

La ansiedad carece de utilidad a menos que logres convertirla en una forma de defensa.

La espiritualmente deficiente búsqueda de seguridad externa. Cuanto más pobres somos por dentro, más intentamos enriquecernos exteriormente.

Demuestra tu reconocimiento cuando corresponda. Las felicitaciones, sin duda, incitan a realizar un mayor esfuerzo y a desear mejorar. Sé generoso ofreciendo alabanzas sinceras.

Un maestro es quien indica el camino hacia la verdad, no quien la ofrece.

Las técnicas de aprendizaje desprovistas de experimentación interior sólo conducen a la superficialidad.

Si te pones en ridículo, siempre habrá alguien dispuesto a reírse de ti. La ostentación es la idea de gloria que tienen los tontos.

El amor nunca se pierde. Si no es recíproco, volverá a ti para suavizar y purificar tu corazón.

La felicidad es buena para el cuerpo, pero la desdicha fortalece el espíritu.

Los amigos falsos son como las hojas en otoño, las encuentras en todas partes. Deja que la amistad ascienda lentamente hacia la cima; si se da mucha prisa, pronto se quedará sin aire.

Es la voluntad la que hace a un hombre, el éxito requiere perseverancia.

El ser interior es el verdadero. Para tomar conciencia de nuestro ser verdadero debemos estar dispuestos a vivir sin depender de la opinión de los demás. Cuando somos completamente autosuficientes podemos perder el miedo a no ser estimados por los demás.

Al tomar conciencia de que mis emociones son tanto positivas como negativas, crearé hábitos diarios que impulsarán el desarrollo de las emociones positivas y me ayudarán a convertir las negativas en alguna forma de acción útil.

Es el ego el que se planta rígidamente frente a las cosas que vienen desde fuera, y es esa rigidez del ego la que nos impide aceptar todo aquello que nos toca enfrentar.

El camino de la verdad no es la convicción, ni el método, sino la percepción. Es un estado de conciencia sin esfuerzo, conciencia flexible, conciencia sin elección. La conciencia funciona sólo si puede actuar libremente, sin interferencias. No condenes, no justifiques.

Si tu ordenador mental ocupa todo tu tiempo, tu energía se centra en el pensamiento, y ya dejas de ver y oír. En lugar de dirigir tu mirada directamente al hecho, te aferras a formas (teorías) y continúas enredándote más y más, cayendo al final en una trampa.

Cuando la atención no está presente, miramos sin ver, oímos sin comprender; comemos y no reconocemos el sabor de lo que estamos degustando.
Mantente en un punto neutral entre lo negativo y lo positivo; no dirijas tu mente hacia nada.
No lo busques, porque llegará en el momento más inesperado. Déjalo. No busques ni huyas.

Conocer no basta; debemos aplicar. La voluntad no basta; debemos hacer.

Tu eres lo que eres, y la sinceridad contigo mismo ocupa una parte definitiva y esencial en el permanente proceso de convertirte en un ser humano real y no de plástico.

La sucesión del verano y el invierno se convierte en una bendición en el momento en que renunciamos a la fantasía de la primavera eterna.

No descuides la vida preocupándote de la muerte.

El condicionamiento obstruye nuestra visión de la realidad. No la vemos tal como es debido a nuestro adoctrinamiento, torcido y distorsionado.

Lo que ES resulta más importante que lo que DEBERÍA SER. casi todas las personas observan lo que es pensando en cómo debería ser.

La vida fluye y al igual que el agua, se vuelve rancia cuando se estanca.

Pensamientos extraordinarios.
Bruce Lee

Madurar con humor

"Maduramos el día en que nos reímos francamente de nosotros mismos".
(Albert Einstein).

Nos pasamos media vida tratando de tomar en serio nuestro papel en el mundo y, otra media, tratando de aligerar el peso que tuvimos que cargar para salir adelante. Media vida poniendo un rostro grave para que nos tomen en serio y, otra media, tratando de reírnos un poco de nosotros mismos mientras compartimos el “tinglado” de la doble moral y las corrupciones silenciosas. Un espacio lúdico y patético en el que todos “están en el ajo”, incluida la propia persona.

Madurar es un objetivo que promete serenidad y disminución del sufrimiento existencial. De hecho, el proceso de maduración conlleva una permanente reducción de la importancia personal y de la importancia que a su vez, parecen tener las cosasConforme uno crece y se desarrolla, vive la cara y la cruz de la moneda de casi todas las situaciones de la vida. Y dicha toma de consciencia, de pronto, crea la liberación de ese miedo sutil que inspiraba la solemne dramatización del camino de ida.

El hecho de reconocer que hemos cometido todos los pecados que un día atrás llegamos a condenar, disuelve la circunspección con la que se adornan los asustados púberes que todavía creen en lo que opinanEl sentido del humor merece una alabanza que como signo de flexibilidad, pone en “tela de juicio” las verdades que encorsetan a este mundo de ambición uniformada y clones de éxito oficial.

¿Qué puede uno hacer para reírse un poco más de sí mismo?

En principio, no reñir a las partes de nosotros que no “dan la talla” y, seguidamente, proclamar nuestras debilidades y carencias, justo en el momento en que aparecen por la puerta de nuestra consciencia. Una vez reconocidas, conviene dejar el camino de la culpa y la exigencia, y cruzar por el que dice“Reírse rápido de nuestra limitación y torpeza, antes de que se olvide y desparezca”.

Si aún así, a usted le cuesta, ríase de su seriedad, tal vez de sus kilos de más y de su importancia personal. Ríase del miedo al fracaso, del temor al engaño y del fantasma de la soledad. Ríase de su intestino, de sus comilonas y de sus adicciones varias. Ríase de su inseguridad, de sus lágrimas en el cine y de sus anhelos de pareja perfecta. Ríase de su vergüenza, del ridículo que un día hizo y de sus exageraciones patológicas. Ríase de su incertidumbre y de su ansiedad soterrada. Ríase de su cuerpo, de sus enfermedades y de la sutil decadencia. Ríase de su orgullo, de sus envidias y de su impaciencia. Ríase de sus anhelos espirituales, de sus fantasías y de sus ansias varias. Ríase de sus dolores, de sus lágrimas y de sus miedos a empezar una vez tras otra..

Ríase de su insolencia, de sus fallos de la puntual estrechez de su consciencia. Ríase de sus bajones, de su cólera y de sus carencias. Ríase del flujo de sus dineros, de sus pasiones y de sus emociones extremas. Ríase de los momentos opacos, de sus ciclos bajos y de las noches oscuras del alma. Ríase de su incomodidad ante las críticas, de su perfeccionismo y de la densidad de su cólera. Ríase de la enfermedad y del miedo a una muerte sin vuelta. Ríase de no haber hecho lo que queríade no haberse enamorado más de la vida y de haber perdido el profundo sabor de la Presencia.

Ríase de los momentos miserables en los que siente perdido el noble rostro de su alma.

De Inteligencia del Alma de José María Doria