martes, 6 de junio de 2017

La proyección psicológica. Somos espejos



“Lo que vemos en los demás nos dice mucho de nosotros mismos”

El exterior actúa como un espejo para nuestra mente, en él vemos reflejadas diferentes cualidades o aspectos de nuestro propio ser. Cuando observamos algo que no nos gusta de alguien, sentimos desagrado y rechazo; sin duda esto indica que de alguna manera ese aspecto que nos desagrada existe en nuestro interior. Es nuestro inconsciente, ayudado por la proyección psicológica, lo que nos hace pensar que el defecto sólo existe “ahí fuera”, en esa otra persona.

La proyección psicológica es un mecanismo de defensa mental mediante el cual una persona atribuye a otros: sentimientos, pensamientos o impulsos propios que niega o le resultan inaceptables para sí misma. Este mecanismo se pone en marcha en situaciones de conflicto emocional o cuando nos sentimos amenazados interna o externamente.

Cuando nuestra mente entiende que existe una amenaza para la propia salud y estabilidad mental ésta realiza un lanzamiento hacia el exterior de todas esas cualidades, atribuyéndoselas a un objeto o sujeto externo a nosotros mismos. De esta manera, nuestra mente logra aparentemente (aunque no en realidad, ya que más bien se trata de un autoengaño) poner estos contenidos amenazantes afuera. Estas proyecciones son válidas tanto para características negativas (odio, rencor, envidia… ) como para positivas (admiración, idealización, cariño…) El mundo interno tiende a teñir el mundo externo con sus propias característicasEste tipo de mecanismo psicológico tiene un papel especialmente interesante en el amorcuando solemos atribuir a la persona amada determinadas características que sólo existen en nuestra personalidad.

A modo de ejemplo, se puede decir que cuando piensas en otra persona, te caiga bien o te caiga mal, experimentas una sensación interior sólo por el hecho de pensar en esa persona. Esto significa que estás experimentando un sentimiento incluso en su ausencia. Lo que importa en cualquier relación es lo que sucede en tu mente, pues es ahí donde existen las relaciones. Recuerda que una relación es algo que no existe físicamente. Se trata de algo creado por las mentes. Las relaciones no existen, sino que existen las personas que se relacionan. Por todo esto, resulta muy poco útil trabajar sobre las relaciones en sí, y mucho más efectivo centrarse en la manera que uno tiene de relacionarse.

A menudo pensamos que “conocemos” a otras personas cuando en verdad lo que estamos haciendo es proyectar sobre ellas nuestra propia realidad. Incluso cuando estamos en presencia de dichas personas, la proyección nos parece más veraz, cuando simplemente lo que está pasando es que superponemos nuestra visión proyectada de la persona sobre su imagen física captada por nuestros sentidos.

Lo importante es DARSE CUENTA de que aquello que proyectamos en los demás, es verdaderamente algo que habla (más de lo que queremos admitir) sobre nosotros mismos. Observar dice más sobre el observador que sobre lo que se observa. Darnos cuenta de esto, ponerle consciencia a este mecanismo mental nos permite recuperar el control sobre lo que está sucediendo para poder hacernos cargo y trabajar aquellos aspectos de nosotros de los que no deseamos hacernos responsables, aspectos que no admitimos como propios y que están jugando en nuestra contra.

Gran parte del trabajo que se realiza en edesarrollo personal consiste en librarse de estas proyecciones estableciendo una frontera definida entre la descripción que hacemos de lo que sucede y lo que sucede realmente.

Y es que casi constantemente INTERPRETAMOS todo lo que está teniendo lugar y lo tomamos por cierto, creyéndolo y creando nuestra propia interpretación de las cosas y viviendo de acuerdo a ella, distorsionando de esta manera los hechos e involucrando a otras personas en nuestro ensueño, creando un conflicto que en realidad sólo existe en nuestro interior. La meditación ayuda a trazar esta frontera y, de hecho, uno de sus objetivos es aprender a ver las cosas como realmente son.

►“Todo lo que te molesta de otros seres es sólo una proyección de lo que no has resuelto de ti mismo”(Buda)

►“No vemos a los demás como son, sino como somos nosotros” (Immanuel Kant)

►“Muy a menudo, lo que encontramos difícil en los demás es precisamente aquello que no hemos resuelto dentro de nosotros mismos. Si lo hubiéramos resuelto inicialmente, nunca se hubiese convertido en un problema crónico” (Robert Dilts)


 http://meditacion2000.blogspot.com.ar

lunes, 5 de junio de 2017

Los niños expresan nuestros conflictos


Una de las primeras preguntas que uno se hace cuando empieza a descubrir la Biodescodificación es ¿Qué pasa con las enfermedades o síntomas que padecen los niños? ¿También ellos tienen conflictos inconscientes? Y la respuesta nunca es fácil… claro que tienen conflictos inconscientes, pero no de la misma forma que nosotros, son conflictos que nacen de sus necesidades no satisfechas que cuando son muy pequeños son necesidades tan básicas como comer, dormir y el afecto en forma de contacto físico y, a medida que vamos creciendo, las necesidades se van volviendo más complejas…

Cada vez tenemos más información respecto a lo que sienten y lo que viven los niños en cada edad, y  hay muchos autores que están de acuerdo en el hecho de que a nivel emocional, la madre y el niño están totalmente conectados desde la concepción hasta que el niño tiene 7 años, incluso hay autores como Laura Gutman que sostienen que los niños hasta los 3 años experimentan una fusión emocional con la madre, comparten con ella todo su campo emocional, así el niño vive como suyas las emociones de la madre porque en este momento, todavía no puede distinguir entre unas y otras…

En Biodescodificación sabemos que existe un periodo al que llamamos Proyecto Sentido, que va desde la concepción hasta los 3 años, donde se graban multitud de programas que vamos a desarrollar a lo largo de nuestra vida se graban programas de si somos deseados o no deseados, se graba toda la información de la situación de la pareja o de la familia en ese momento, todas las emociones de la madre, sus conflictos, sus dudas, se graban las situaciones sociales o históricas del lugar donde estamos, toda la información del embarazo, también información sobre cómo hemos llegado al mundo, cómo se ha recibido al bebé y todas y cada una de las experiencias propias del niño y de la madre durante este tiempo.

Hasta los siete años, los niños son una auténtica esponja emocional, porque como todavía no tienen el neocórtex totalmente desarrollado, son especialmente sensibles a las emociones, que son el lenguaje que les es propio y además las perciben de forma limpia, sin contaminación racional alguna.

Y así es como los niños, a través de las enfermedades y síntomas que padecen, nos están reflejando nuestros propios conflictos inconscientes, como el más amoroso de nuestros espejos: un niño que tiene a menudo dolor de barriga puede estar expresando una dificultad de la madre para digerir algo que le está ocurriendo, o un niño que se enferma de bronquitis o que tiene asma habitualmente está denunciando un ambiente tóxico en casa y dificultades de relación en su entorno más cercano o un niño con otitis frecuentes está expresando una irritación de la madre por escuchar algo que no quiere oír…

Dejando atrás la culpa, si queremos ayudar a nuestros hijos pequeños a que estén más sanos, si queremos evitarles sufrimiento, ocupémonos de nosotros mismos, tomemos conciencia de nuestras emociones, expresemos cómo nos sentimos, hablemos, busquemos ayuda… pero sobre todo no hagamos como que no pasa nada, porque ellos, los niños, perciben desde su inocencia muchísimo más de lo que nos parece y están dispuestos a mostrárnoslo incansablemente… así que acojamos la oportunidad que nos da la vida para crecer y hacernos cargo de nosotros mismos. Y sería fantástico aprovechar para expresarles cómo nos sentimos, para que ellos puedan distinguir lo que no es suyo y empezar a poner palabras a las emociones que están sintiendo…

A veces ocurre que trabajando con la mamá no encontramos nada relacionado con este malestar del niño… entonces es muy habitual que los niños estén expresando un conflicto del clan, de hecho siempre que un niño nace con una enfermedad congénita es algo que obviamente no es suyo, y va a ser muy útil hacer el estudio del árbol genealógico, para tratar de entender qué está reparando este niño con esta enfermedad y así poder liberar al niño y al clan.

Todo lo que le ocurre al padre también va a influir al niño, pero de otra forma, de hecho el niño lo va a sentir pero a través de la madre y con las emociones de la madre, por lo que hemos dicho de la conexión… Es decir que si por ejemplo el papá se queda sin empleo y la mamá no se siente preocupada porque confía en que va a encontrar algo pronto, no le da importancia porque son cosas que pasan y piensa que de alguna forma van a salir de esta… aunque el padre se sienta muy frustrado o tenga miedo a la escasez o se sienta deprimido el niño no va a sentir estas emociones como si fueran suyas, y  en cambio si la mamá lo vive con angustia y sufrimiento, el niño va a vivir esa angustia como propia y puede que la exprese a través del cuerpo, que es la via más directa para que los niños expresen las emociones que no pueden comprender.

Así como la mamá va a ser el punto de referencia desde la concepción hasta los 7 años, el papá va a ser clave desde los 7 a los 14 años, época importante para incorporar aprendizajes que tienen que ver con los límites, las consecuencias de nuestras acciones en los demás, las normas, la autoridad, la sociabilidad… pero esto ya es otro tema porque a partir de los 7 años, el niño ya empieza a expresar sus propios conflictos y justamente la figura del padre a partir de esta edad ayuda a diluir esta fusión con la madre, permite que el niño sea más autónomo y que se empiece a regular por él mismo.


Psicología/Mónica Calderón
https://sanacionholisticasalamanca.wordpress.com

domingo, 4 de junio de 2017

EL HOMBRE LUNAR Y EL DIVINO MASCULINO


El Hombre Lunar es el hombre Presente, sensible, que ofrece nobleza, protección, provisión y fuerza para la creación de toda vida. Explora su Alma, y es capaz de limpiar su energía de los programas que lo alienan.

El Hombre Lunar está naciendo en los corazones y cuerpos de muchos hombres, nace en Silencio.

Hacen falta hombres iniciadores que, como en las antiguas tribus, acompañen a sus hermanos, codo con codo, a retomar su Esencia Masculina. Sus padres raramente pudieron iniciarlos, los últimos iniciadores fueron, quizás, los bisabuelos.
El hombre de nuestro tiempo guarda internamente el deseo de recuperar su orgullo sagrado como Amante y Padre, protector de su entorno.
Kali Yuga es tiempo de mujeres solas, pero en la Consciencia de Unidad que crece, esto también está llegando a su fin.

La Mujer Radiante sana e inicia al Hombre Lunar.

Puede hacer esto porque está nutrida desde dentro, siente al Espíritu vibrar en su cuerpo, ha alcanzado una sensualidad que crece, no importa su edad, como resultado de su profunda conexión con la Esencia de Vida.

Entonces, está en tren de superar su tendencia a controlar al hombre y poseerlo.

Esta Respiración de ella, como una tierra aireada que puede retener la semilla sin ahogarla, le permite a él permanecer, sanarse, refugiarse y crecer.
Él le ofrece el apoyo que, a fuerza de acostumbrarse a autogenerarse, ella había olvidado que era posible recibir.

Ella forjó o está forjando su independencia, pero el anhelo de una Unión auténtica sigue intocable en sus profundidades. Ella está comenzando a distinguir entre desapego y renuncia.

La guerra de los sexos, inducida, también está terminando.

El Paraíso en la Tierra, convoca pares, parejas equilibradas, y está potenciando encuentros. Estos encuentros forman parte de los próximos pasos del Despertar, ya que, fuera de todas las ilusiones románticas, la relación en intimidad es una iniciación a una más y más amplia apertura del corazón para ambos. El Hombre Lunar es el amante compañero de la Mujer Solar, la Mujer Radiante.

Juntos construyen el Paraíso de la Nueva Tierra, un Edén que florece y no conoce el destierro.

Alana Messineo
https://elportaldealana.com