martes, 5 de julio de 2016

Viaje Hacia el Bienestar

Viaje Hacia el Bienestar – Descubre tu propia Sabiduría Interior


El discernimiento representa visiones internas que cambian nuestra vida. La mente cósmica nos susurra en los espacios de silencio que existen entre nuestros pensamientos y así surge la repentina sabiduría que nos transforma. El discernimiento produce una mutación de la conciencia que puede cambiar radicalmente la materia de nuestro cuerpo y alterar nuestra experiencia en el mundo. Cuando se reconoce algo por primera vez, como un rayo repentino de luz, este reconocimiento no es algo ni tiene estructura lingüística, ya que se trata del sentimiento súbito de saber y ese conocimiento resulta liberador, pues sin necesidad de palabras, lo reconocemos como la verdad. Más tarde, este conocimiento se traduce en palabras y éstas refuerzan la sabiduría que ya ha tenido lugar. Es mi deseo que las palabras expresadas en las páginas que siguen os recuerden la verdad que ya conocéis.
La salud perfecta, pura e invencible es el estado que perdimos. Volvamos a ganarla y, así, ganaremos un mundo.
La salud no es simplemente la ausencia de enfermedad. Es la sensación de júbilo que debería acompañarnos todo el tiempo, un estado de bienestar positivo.
Nuestro mecanismo de curación interior coincide perfectamente con el de nuestro exterior. 
El cuerpo humano no es como la verde pradera, pero su brisa, el agua cantarina, la luz del sol y la tierra se transformaron en nuestro interior y no quedaron en el olvido.
Todos necesitamos ser curados en el más alto sentido haciéndonos perfectos en mente, cuerpo y alma. El primer paso consiste en darse cuenta de que aún es posible.
Para crear la salud se necesita de una nueva clase de conocimiento, basado en un concepto más profundo de la vida.
Aunque nuestra fachada humana de piel y huesos sea muy convincente, es en realidad una máscara, una ilusión que disfraza nuestro verdadero ser, un ser interior que no tiene limitaciones.
La razón por la que no todos somos capaces de llevar el proceso de curación hasta donde este puede llegar es que discrepamos drásticamente en nuestra capacidad de movilizarlo.
Existen algunas cosas que no requieren trabajo alguno y la curación es una de ellas. No es necesario que te esfuerces para llegar a silenciar tu mente; no debes trabajar para encontrar viejas heridas. Todas estas cosas, una vez que son descubiertas, representan un hecho. Este descubrimiento comienza en cualquier lugar en que te encuentres, pero su meta es siempre la misma: la revelación del todo que hace que el cuerpo, la mente y el alma sean una unidad.
La salud y la enfermedad se vinculan como si fueran las variaciones de una melodía. Pero la enfermedad es una variación incorrecta, una distorsión de ese tema.

La causa de la enfermedad a menudo resulta compleja en extremo, pero de algo podemos estar seguros: nadie ha demostrado que enfermarse sea necesario.
Extracto de “Viaje Hacia el Bienestar”- Deepak Chopra
http://deepakchopraesp.blogspot.com.ar/

La Sincronicidad de la Naturaleza

Deepak Chopra demuestra que cada coincidencia que ocurre en nuestra vida es portadora de un mensaje sobre el potencial milagroso de cada instante. El Sincrodestino trae nuevas maneras de percibir y de vivir; es una especie de renacimiento o despertar. El autor revela que si entendemos las fuerzas que dan forma a las coincidencias, podemos aprender a vivir en un nivel más profundo y lograr el acceso al flujo de la sincronicidad que yace en el núcleo de nuestra existencia.



Los ejemplos de sincronicidad en la naturaleza son tan frecuentes que los consideramos normales. Sin embargo, si afinamos la mirada para que observe lo que parece casi imposible, el concepto de sincronicidad comenzará a cobrar sentido. Por ejemplo, mira hacia el cielo en un día de verano y espera a que aparezca una parvada. Al igual que los peces del cardumen que mencioné antes, todas las aves vuelan en formación; cuando cambian de dirección, todas ejecutan los mismos movimientos sincrónicamente. Una parvada puede constar de cientos de individuos y, sin embargo, cada uno se mueve en armonía con todos los demás sin que haya un líder. Cambian de dirección en un instante; todas las aves modifican su curso, exactamente en el mismo momento, y lo hacen a la perfección. Jamás vemos que choquen entre sí en pleno vuelo. Se elevan, giran y descienden de tal manera que parecen un organismo, como si estuvieran recibiendo instrucciones y todos obedecieran al instante.
¿Cómo es posible?
No hay tiempo suficiente para ningún intercambio de información, por lo que cualquier correlación de actividad . entre las aves debe ocurrir de manera no circunscrita. Los físicos han trabajado durante años para descubrir las propiedades que guían los movimientos de las aves, pero hasta ahora han fracasado.
La complejidad y precisión absoluta del comportamiento de estos animales, invariablemente los deja boquiabiertos.
Los ingenieros han estudiado los movimientos de las aves, con la intención de descubrir principios que puedan solucionar los embotellamientos.
Si pudieran utilizar el mecanismo sensorial de las aves y crear a partir de éste pautas para el diseño de carreteras o automóviles, tal vez no volvería a haber accidentes de tránsito. Sabríamos con anticipación qué van a hacer todos los demás autos que están en el camino, en todo momento. Sin embargo, este proyecto nunca tendrá éxito, pues no se puede trasladar al mundo mecánico.
La comunicación instantánea que vemos comúnmente en parvadas y cardúmenes proviene del nivel espiritual, de la inteligencia no circunscrita y organizadora que reside en el ámbito virtual.
El resultado es la sincronicidad: seres totalmente sintonizados con el entorno y con todos los demás, bailando al ritmo del cosmos.

Fragmento de “SINCRODESTINO”-Dr. Deepak Chopra
http://deepakchopraesp.blogspot.com.ar/

domingo, 3 de julio de 2016

¡Espectacular!



Se trata de una formación rocosa de un lago de Birmania. 
Sólo puede verse esta imagen durante un período determinado del año por la iluminación del sol.
¿Todavía no sabes por qué es espectacular? 
Inclina tu cabeza sobre el hombro izquierdo. . .